Destacó logros de su gestión inicial, pero planteó que el incremento poblacional obliga a crear nuevas instituciones.
Juan Reggioni asumió su segundo mandato en la Intendencia de Fernández Oro, destacando las obras realizadas en su primera gestión y comprometiendo “profundizar la transformación de la ciudad”. Amparado en el doble paraguas de los gobiernos provincial y nacional, buscará continuar promoviendo planes de viviendas y gestionará las construcciones de un hospital, un colegio secundario y un destacamento policial en la zona oeste.
La ceremonia se desarrolló en el salón del club Fernández Oro, que lució colmado. También juraron los miembros del Concejo Deliberante y del Tribunal de Cuentas, que asumirán sus funciones el lunes. Pedro Cid, Dina Migani, Walter Soto (Frente para la Victoria) y Mariano Lavín (UCR) integrarán el Legislativo. Mientras que Miguel Padua, Marcela Bravo y Arturo Darroux estarán en el organismo de control.
Reggioni realizó un balance de su primera gestión. “La calidad de un político está en hacer lo que dice. Y creo que hemos cumplido. Hace cuatro años nos encontramos con tres problemas fundamentales: acceso a la tierra, a la vivienda y empleo”, dijo antes de enumerar obras y gestiones.
Destacó las 100 viviendas entregadas y en ejecución y los más de 500 lotes sociales, de los cuales adjudicó 276 en sus primeros cuatro años al frente de la comuna. “La vivienda y el acceso a un terreno eran los principales problemas cuando asumimos”, manifestó el dirigente del Frente para la Victoria.
También valoró la implementación de cámaras frigoríficas y galpones para desarrollar la actividad frutihortícola, que tendría una segunda etapa: “A los chacareros que están presentes, les digo que pueden seguir contando conmigo”.
Reggioni consideró que es factible lograr esas obras de gran envergadura para la ciudad porque “el gobierno nacional y provincial tienen el mismo signo político”. Sobre el cambio de mando en Río Negro, consideró: “Ahora vamos a tener respuestas que antes no tuvimos”.
Participaron del acto el vicegobernador electo, Alberto Weretilneck, los futuros legisladores Jorge Barragán, Ariel Rivero, Norma Dellapítima y Rubén López. También lo acompañaron las intendentes electas Liliana Alvarado (Cinco Saltos) y Sabina Costa (Allen) y el futuro secretario de Trabajo del gobierno provincial, el sindicalista Rolando Troncoso.
Futuro
En tanto fijó como principales objetivos para los próximos cuatro años lograr la construcción de un hospital, un colegio secundario y un nuevo destacamento policial son los máximos objetivos en obra pública para el nuevo mandato. “Fernández Oro ya no es un pueblito, estas son las necesidades de una ciudad de más de 10.000 habitantes que puede tener 20.000 en seis años”, detalló.
Estimó que “hay un centro de salud mejorado y un colegio secundario desbordado, con más de 600 alumnos”. Por ello, ya inició gestiones con Educación para la construcción de un nuevo colegio de nivel medio, “de modalidad técnica”.
También “comprometió” a Weretilneck para que la ciudad reciba más agentes policiales. “Y necesitamos un Destacamento policial en la zona oeste, para ello ya cedimos un terreno”, explicó.
Además, sostuvo que uno de los primeros focos de gestión será el mejoramiento del Parque Industrial. “Tenemos que lograr la radicación de empresas, porque es una forma de generar empleo para los vecinos”, concluyó.
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