Viedma (ADN).- En un trámite cuyo origen está en el Poder Ejecutivo, en diciembre del año pasado, falsificaron la firma del ex gobernador Carlos Soria, engañando de esa manera a los 46 legisladores provinciales y, por medio de ellos, a toda la sociedad.
La maniobra se concretó en por lo menos cuatro documentos públicos, entre ellos el proyecto de Presupuesto Provincial. De repetirse esta simulación en los decretos del Poder Ejecutivo – muchos de los cuales aún no han sido publicados - podrían plantearse nulidades en los actos de gobierno que se iniciaron como consecuencia de estas normas.
El ex gobernador Carlos Soria presentó 22 iniciativas con acuerdo de ministros, es decir, leyes que se tratan en única vuelta parlamentaria. De ellas, por lo menos cuatro tienen una firma que no es la verdadera.
La firma es el nombre y apellido que una persona escribe de su propia mano en un documento para darle autenticidad.
El 21 de diciembre del año pasado ingresó a la Legislatura el proyecto del Presupuesto General de Gastos, la ley impositiva a los automotores, autorización al Ejecutivo para concretar una operación de crédito público con el Estado nacional por 280 millones de pesos y la modificación de la Agencia de Recaudación Tributaria.
Todas las iniciativas debían ir con la firma del gobernador, pero por lo menos cuatro de esos proyectos ingresaron con una burda imitación de la firma de Soria y circularon por los distintos estamentos legislativos sin que nadie advirtiera la maniobra. Así, pasaron por la Comisión de Asuntos Constitucionales y de Presupuesto y Hacienda y posteriormente ingresaron al recinto para ser tratados en la sesión del 27 de diciembre del 2011, fecha que fueron sancionados.
De iniciarse una investigación, esta deberá determinar la responsabilidad de los funcionarios que deben supervisar el trámite burocrático y que actúan como ministros de fe, para que toda la tramitación ahora se realice en la forma correspondiente.
Debido a la muerte de Soria, el camino inexorable para determinar cuales firmas son verdaderas es que un perito compare una firma indubitada de Soria con las que se plantean que son falsas.
En el medio de la tormenta quedó la cuestionada Secretaría Legal y Técnica, que le genera un nuevo dolor de cabeza al gobernador Alberto Weretilneck,
Además de los funcionarios de esa Secretaría, que podrán aportar elementos para determinar quien fue el que falsificó la firma del ex gobernador Carlos Soria, también lo podrá hacer el ministro de Economía, Alejandro Palmieri, que estampó su firma al lado de la imitación, sin haber percibido el engaño.
Ahora surgirá la pregunta si estas leyes, que nacieron de proyectos que no contaron con la certificación de autenticidad de Soria, son legítimas o legales. La polémica recién se inicia.
También no podrá soslayarse la especulación que nacerá sobre si alguno de los 189 decretos que dejó el ex gobernador Soria, que tan celosamente se resguardan del público, padece de una falsificación como ocurre con estos cuatro proyectos de leyes detectados.
Está claro que la dramática muerte de Soria impidió que el documento con la firma falsa fuera reemplazado por uno verdadero y, por eso, quien quiera verificar el engaño sólo debe presentase en la Legislatura y pedir los originales –que son públicos - para confirmar con sus propios medios la información. (ADN)
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